En el día de la asunción de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, el papa Francisco envió un mensaje con una mezcla de bendiciones y advertencias. Desde Roma, el líder de la Iglesia Católica pidió al mandatario que promueva una sociedad «más justa» y libre de «odio, discriminación o exclusión».
El telegrama, enviado desde el Vaticano, resalta los desafíos globales que enfrenta la humanidad, incluyendo la necesidad de fomentar la paz y la reconciliación. «Pido a Dios que guíe sus esfuerzos en la promoción de la paz y de la reconciliación entre los pueblos», señaló Francisco, subrayando su preocupación por las políticas migratorias de Trump.
Críticas al plan de deportaciones masivas
Francisco se mostró especialmente crítico respecto a las promesas de deportación masiva que Trump reiteró en su campaña y que podría iniciar mediante decretos ejecutivos en los primeros días de su mandato. Según estimaciones del Colegio de la Frontera Norte de México, unas 13,5 millones de personas sin estatus legal en Estados Unidos podrían ser expulsadas.
En una entrevista emitida anoche en el programa italiano Che tempo che fa, el pontífice calificó esta posible medida como «una desgracia». «Hará pagar la cuenta del desequilibrio a los pobres desgraciados que no tienen nada. Eso no está bien, así no se resuelven las cosas», advirtió.
Bendiciones para Estados Unidos
A pesar de sus críticas, Francisco aseguró sus oraciones por Trump y el pueblo estadounidense. «Le aseguro mis oraciones para que Dios Omnipotente le conceda sabiduría, fuerza y protección en el ejercicio de sus altas funciones», escribió, destacando los ideales de Estados Unidos como «tierra de oportunidades y de bienvenida para todos».
El Papa también enfatizó la importancia de enfrentar los retos globales, como el «flagelo de la guerra». Con Trump comprometido en negociaciones para la paz en Ucrania y el reciente alto al fuego entre Israel y Hamas, Francisco expresó esperanza en que estos esfuerzos prosperen.
Un mensaje de unidad
En su cuenta oficial en redes sociales, Francisco reiteró un mensaje espiritual dirigido a los cristianos: «Nada como la oración según el Espíritu Santo hace que los cristianos se sientan unidos como familia de Dios, que sabe reconocer las necesidades de cada uno para convertirlas en invocación e intercesión de todos». Aunque no mencionó directamente a Trump, el mensaje refuerza su llamado a la unidad y la justicia.
La relación entre Francisco y Trump ha sido históricamente tensa, marcada por discrepancias sobre temas clave como la inmigración y el cambio climático. Sin embargo, el Papa continúa ofreciendo sus bendiciones y llamando al diálogo en busca de un mundo más equitativo.