En un giro inesperado para la industria tecnológica global, el chatbot chino DeepSeek ha alcanzado un éxito arrollador, desafiando a gigantes como ChatGPT y sorprendiendo a los mercados bursátiles. En tan solo unos días desde su lanzamiento, la aplicación ha superado en descargas a sus competidores, convirtiéndose en la más descargada en Estados Unidos. Este fenómeno ha generado una caída notable en las acciones de empresas tecnológicas estadounidenses como Nvidia, Microsoft y Meta.
Un modelo de bajo costo con gran rendimiento
DeepSeek ha sido desarrollado por una fracción del costo de sus rivales. El modelo de IA, conocido como DeepSeek-V3, ha sido creado por unos US$6 millones, una cifra considerablemente menor en comparación con los miles de millones invertidos por empresas como OpenAI. El uso de tecnologías de código abierto, que permiten modificar y distribuir software gratuitamente, ha sido clave para mantener los costos bajos.
A pesar de los cuestionamientos sobre su calidad, DeepSeek ha demostrado ser capaz de realizar tareas complejas como matemáticas, programación y razonamiento en lenguaje natural a un nivel comparable con los modelos más avanzados de OpenAI. Según los creadores de DeepSeek, su modelo tiene un rendimiento similar al de las versiones más recientes de la IA estadounidense, lo que ha sorprendido a muchos en la comunidad tecnológica.

La “revolución” china en IA
Este éxito de DeepSeek llega en un contexto tenso entre Estados Unidos y China, en un momento en que las restricciones estadounidenses sobre la exportación de chips avanzados a China han intensificado la carrera por la supremacía en inteligencia artificial. Para sortear estas restricciones, los desarrolladores chinos de IA se han centrado en la colaboración interna y en la búsqueda de enfoques innovadores que requieran menos capacidad informática y, por ende, menores costos.
El “momento Sputnik de la IA”, como lo ha denominado el inversor Marc Andreessen, refleja la sorpresa con la que ha sido recibido el avance de China en este campo. La reacción en los mercados ha sido inmediata: las acciones de Nvidia, fabricante líder de chips para IA, cayeron más de un 16%, lo que representó una pérdida de más de US$500,000 millones en su valor de mercado. Este desplome ha tenido un efecto dominó en otras compañías tecnológicas involucradas en la producción de chips y hardware de IA.
Desafíos y futuro incierto
A pesar del gran impacto que ha generado DeepSeek, los expertos señalan que el futuro del chatbot y de las empresas chinas de IA podría estar marcado por varios obstáculos. El acceso restringido a chips avanzados y las tensiones geopolíticas podrían limitar el crecimiento de la empresa. Sin embargo, los analistas también advierten que el modelo de IA de bajo costo podría poner en peligro las inversiones realizadas por los competidores de DeepSeek, particularmente aquellos que han apostado por infraestructuras más costosas.
Liang Wenfeng, fundador de DeepSeek, se mostró sorprendido por la reacción global ante el precio bajo de su modelo. Según él, la estrategia de su empresa ha sido siempre mantener los costos bajos para ofrecer un producto accesible, sin sacrificar el rendimiento. La compañía, fundada en 2023 en Hangzhou, China, ha logrado generar un gran interés, sobre todo en el mercado estadounidense, donde su popularidad sigue creciendo rápidamente.
Con este inesperado ascenso, DeepSeek podría estar marcando el inicio de una nueva era en la inteligencia artificial, una en la que la competencia no solo se basa en el rendimiento, sino también en la capacidad de ofrecer soluciones tecnológicas más accesibles para todos.