El club San Pablo vivió un insólito y peligroso episodio previo a su encuentro por la Copa Libertadores, cuando un dirigible que había sido contratado para una campaña publicitaria se estrelló contra varias viviendas en la región de Osasco, San Pablo. El accidente, que tuvo lugar este miércoles, generó un gran revuelo entre los residentes de la zona, aunque afortunadamente no hubo víctimas fatales.
El dirigible, identificado con la matrícula PR-ZAD y operado por la empresa Airship de Brasil, estaba siendo utilizado para sobrevolar la ciudad y exhibir mensajes de aliento al equipo antes del crucial enfrentamiento ante Botafogo por los cuartos de final de la Libertadores. Entre los lemas que llevaba el zeppelin en sus laterales estaban «Torcida que conduce» y «Vamos, São Paulo», en clara referencia al apoyo de los hinchas hacia el equipo.
El accidente ocurrió alrededor de las 12 del mediodía. Según informaron las autoridades locales, la aeronave cayó sobre algunas viviendas en Osasco, una localidad del área metropolitana de San Pablo. Tanto el piloto, identificado como el comandante Charles Chueiri, como su acompañante, resultaron heridos pero están fuera de peligro, siendo atendidos en un hospital cercano por lesiones leves.
«El comandante y el pasajero fueron socorridos rápidamente y, afortunadamente, están bien», señaló la empresa Airship de Brasil en un comunicado oficial. De inmediato, el equipo técnico de la compañía se trasladó al lugar del accidente para brindar asistencia y evaluar los daños causados por la caída del dirigible.
Este no era el primer vuelo publicitario que realizaba el San Pablo con el mismo dirigible. Ya en 2023, la misma aeronave había sobrevolado sin inconvenientes la ciudad antes de la final de la Copa de Brasil. Sin embargo, en esta ocasión, los planes no salieron como se esperaba, y el dirigible, de 49 metros de largo y 17 metros de altura, terminó impactando contra las viviendas.
El San Pablo, por su parte, emitió un comunicado lamentando el incidente y asegurando que están brindando todo el apoyo necesario tanto a los afectados por el accidente como a los tripulantes de la aeronave. “Pese al accidente, afortunadamente no hubo heridos de gravedad y el club está proporcionando todo el soporte necesario a los tripulantes y otros involucrados”, afirmó un portavoz del club.
Investigación en curso
Las autoridades aeronáuticas de Brasil ya han comenzado la investigación para determinar las causas del accidente. El Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (Cenipa) ha sido activado y está recopilando evidencia en el lugar del siniestro. «El análisis incluirá la verificación inicial de los daños causados a la aeronave y cualquier daño que haya provocado el accidente, así como la recopilación de testimonios y pruebas que permitan esclarecer las causas», detalló Cenipa en un comunicado.
Por su parte, la empresa Airship de Brasil se comprometió a cooperar completamente con las autoridades para garantizar que se aclaren las causas del incidente y prevenir futuros accidentes similares.
El accidente del dirigible no fue el único contratiempo que rodeó la previa del partido decisivo entre San Pablo y Botafogo. El equipo visitante, que actualmente lidera el Brasileirao con 56 puntos, fue blanco de una ruidosa «bienvenida» por parte de los hinchas locales, que utilizaron fuegos artificiales durante toda la madrugada en las inmediaciones del hotel donde se alojaba el equipo carioca. Además, según reportes, los ultras del San Pablo llegaron a ingresar al edificio y activaron la alarma de incendios, obligando a los jugadores de Botafogo a desalojar sus habitaciones en plena madrugada.
A pesar de los problemas, el partido de vuelta por los cuartos de final de la Libertadores, que se disputará en el estadio Morumbí, sigue en pie, y tanto San Pablo como Botafogo se juegan su pase a las semifinales de la prestigiosa competición sudamericana, luego del empate 0-0 en el partido de ida en Río de Janeiro.
Este insólito accidente con el dirigible será recordado como un episodio inusual en la previa de un partido tan importante, aunque, afortunadamente, no hubo que lamentar tragedias personales.