La Proclama le realiza preguntas a los integrantes del cuarteto humorístico sobre su experiencia en los Shows.
El grupo de teatro Cuatro Quesos hizo un show de comedia improvisada en un escenario tucumano. Mediante juegos e interacciones con el público, los artistas lograron crear escenas y narrativas humorísticas creadas en el momento, haciendo que lo absurdo y el sinsentido se mezclen para crear momentos divertidos y ocurrentes.
La Proclama dialogó con el cuarteto sobre el recibimiento que tuvieron del público ese día, ellos dijeron que los han visto muy bien y que “hubo expectativas medio raras. Era feriado largo y al mismo tiempo jugaba la selección. Pero bastante bien, muy lindo por suerte”. “Por más que sean la primera vez que vengan, nosotros ahí arriba empezamos a sentir que también se contagian de lo que hacemos”, agregaron.
Se le consultó sobre el proceso mental de un actor de comedia improvisada a la hora de pensar las escenas y dijeron que “es muy distinto para cada persona, sobre todo que este grupo el cual tiene formaciones muy distintas o hacemos distintos tipos de teatro. A mí me gusta estar muy atento de todo, entonces la cabeza me va a cien kilómetros por hora. Veo como está mi cuerpo, como está mi compañero, que acaba de pasar o que acaban de decir. La improvisación es eso; estar atento a lo que sucede, agarrarlo, y proponer otra cosa”.
También nos comentaron que “es como un tire y afloje, entre pensar y no pensar. A veces uno se queda mucho tiempo pensando en si lo que está haciendo uno está bien, si queda bien, si me veo bien, si es correcto como lo digo o si mi han escuchado. A veces te quedas muy en eso y te abruma, te bloquea. A través del entrenamiento tu cuerpo ya va sabiendo y va a ciertos lugares tratando de adaptarse. Hay que tratar de sincronizar con el otro”, sostuvieron.