La intendenta Rossana Chahla firmó un acta compromiso para convertir al barrio en un museo a cielo abierto, con participación de la UNT, la Legislatura y expertos internacionales.
La Ciudadela dejará de ser solo un barrio histórico para transformarse en un ícono urbano y cultural de San Miguel de Tucumán. Así lo anunció la intendenta Rossana Chahla, quien este lunes encabezó la firma del Acta Compromiso para la puesta en marcha del proyecto “Barrio Histórico de la Ciudadela – Musealización y Puesta en Valor”, una iniciativa articulada con la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) y la Legislatura provincial, y que contará con la colaboración de referentes internacionales de la transformación urbana de Medellín, Colombia.
El acto se realizó en la sede del Instituto Miguel Lillo, con la presencia del vicegobernador Miguel Acevedo, el legislador Hugo Ledesma, el rector de la UNT Sergio Pagani, la decana de la Facultad de Ciencias Naturales Virginia Abdala, y urbanistas colombianos reconocidos por su trabajo en barrios populares de Medellín.
Un nuevo concepto de barrio
La intendenta Chahla explicó que el objetivo del proyecto es revalorizar el patrimonio social, histórico y cultural de La Ciudadela, barrio que fue escenario de la Batalla de Tucumán en 1812 y que alberga instituciones emblemáticas como el Club San Martín, la Facultad de Ciencias Naturales y el ex Mercado de Abasto.
“Vamos a recuperar el espacio público, mejorar la infraestructura, fortalecer vínculos sociales y crear un museo a cielo abierto”, detalló la jefa municipal. Y remarcó: “La transformación será real si los vecinos se apropian del proyecto, lo sienten propio y participan activamente”.
La experiencia de Medellín será clave en este proceso. Por eso fueron invitados a participar el urbanista Gustavo Restrepo, el comunicador y gestor cultural Jorge Melguizo, y el artista urbano Juan Pablo “Worm” Arango, quienes trabajaron en la transformación de barrios vulnerables en Colombia. Su tarea será asesorar e inspirar el modelo tucumano, adaptándolo a las particularidades locales.
Diagnóstico previo y participación ciudadana
Antes de lanzar el proyecto, se realizó un diagnóstico del barrio, al que Chahla calificó como “una historia clínica urbana”. Con esos datos, el Municipio avanzará en un plan que incluye intervenciones en plazas, iluminación, murales, espacios para la cultura y mejoras en la seguridad.
“Pero nada de eso sirve si no logramos que la gente disfrute su barrio. Lo material se puede construir, pero la verdadera transformación es cultural y social”, insistió la intendenta.
Apoyo institucional y académico
El vicegobernador Acevedo celebró la iniciativa y advirtió que “la integración social y cultural es clave”: “No se trata solo de embellecer, sino de construir comunidad”. Desde la UNT, la decana Abdala señaló que “este proyecto es una alianza profunda entre instituciones democráticas para mejorar la vida de los vecinos”. Y recordó que La Ciudadela fue construida por hijos de inmigrantes, trabajadores, estudiantes y comerciantes, una historia que merece ser contada.
Una nueva identidad urbana
El comunicador Jorge Melguizo, uno de los responsables del cambio en Medellín, destacó que la propuesta busca “crear un barrio museo vivo, dinámico, que sirva tanto para sus habitantes como para los visitantes”. Y subrayó la importancia de “repotenciar espacios como la Casa Belgraniana y sumar propuestas culturales que convoquen a jóvenes, artistas y estudiantes”.
El proyecto ya dio sus primeros pasos en la Plazoleta Azopardo, donde se realizaron obras y murales. Pero lo que se viene es mucho más ambicioso: una Ciudadela revitalizada, con identidad, memoria y futuro.



